Un 24 de Diciembre diferente

El 24 de Diciembre, por lo general y de forma tradicional las familias se reúnen para festejar la navidad, el nacimiento del niño Jesús, una tradición de cristianismo y en especifico de la religion Catolica, pero en esta época moderna las familias se reúnen por muchos otros motivos, el punto es que se reúnen, festejan y celebran juntos.

En mi caso particular si fuera un año normal, me refiero a como eran los años antes de la pandemia, estaría en contra del espíritu navideño, tratando de llevarle la contraria a mis tíos, primos, amigos y familiares que nos reunimos para celebrar la navidad, básicamente ser la oveja negra. El grinch que arruina la cena navideña para todos, era mi trabajo de cada año. 

La fiesta, la cena, los regalos, algunas veces el baile, en pocas palabras el ambiente festivo, propio de estas fiestas, se ha visto cortado por la situación de la pandemia, desde diciembre de 2019, en que surgió esta situación que ha cambiado todo el mundo, para bien o para mal, solo la historia lo dirá, pero ha sido un antes y un después. 

Este año 2021 que está por finalizar tuve la oportunidad de tener una cena de 24 de diciembre similar a como solía ser antes de Diciembre de 2019, y platicando con mis familiares con los cuales me pude reunir, comenzamos a recordar a todas las personas que han fallecido, se me hizo aterrador pensar en 3 personas cercanas, después alguien más dijo otras 4, y otro más menciono 2 mas, un tio mencionó a familias completas que ya no existen, familias de 4 o 5 miembros, que yo no recordaba, pero que en algún punto de mi vida conocí, a algún miembro de esa familia y recuerdo que jugue con los niños de esas familias, que ninguno de ellos vive ahora, en total aproximadamente 200 personas que fallecieron en este tiempo de casi 2 años, personas que no llegue a conocer del todo, pero si tuve algún acercamiento con ellas, por alguna manera a lo largo de mi vida.

Pensar en ellos me hace reflexionar, saber, en que eran de todos los rangos de edad, desde niños, jóvenes, adultos, viejos, hombres, mujeres, madres, padres, hijos, sobrinos, nietos, nietas, sobrinas, casados, casadas, solteros, todas esas personas que significaron tanto para sus seres queridos, ahora yacen bajo tierra, o más bien incinerados, porque bajo el protocolo de Covid-19 es necesario incinerar los cuerpos de personas que mueren de esta enfermedad, al punto es que ya no están vivos.

Así que si seguimos vivos y hemos tenido oportunidad de celebrar con nuestra familia estas fiestas, debemos de estar muy agradecidos, porque ha sido una forma muy cruel de aprender que debemos valorar la vida, debemos valorar que hoy estamos vivos, y que el dia de mañana simplemente ya no podemos estar, que lo que hoy pasa no siempre va a ser de la misma forma, que la vida humana es una efímera existencia que no dura más que un simple suspiro, por eso me parece debemos de estar agradecidos y de dar gracias a Dios de permitirnos seguir vivos. 

La pandemia aún no termina, cuando estoy escribiendo este texto la Secretaria de Salud de México reportan 3520 nuevos casos de covid19, un nuevo récord en este mes de Diciembre que está por terminar, así que solo queda seguirnos cuidando y continuar con las medidas dentro de lo posible.